Fantasía ausente

                                                        Día tras día le imploro a la fantasía ausente para que se haga presente y me haga realidad cada uno de mis sueños, preferentemente uno de ellos, uno solo nada especial, nada fuera del otro mundo, nada que sea imposible, nada más allá de lo que pudo ser entre ella y yo, si ella, ella la fantasía misma, ella la que revoluciona mis sentimientos, la que le da un sentido a todo. A esa, a esa que quiero tener entre mis brazos, a esa que quiero rodearla de besos, a esa que quiero llevar en mis pensamientos día y noche, a esa que quiero amar una vida entera, a esa te pido yo que le enseñes el camino de vuelta a casa, mi casa, su casa, el camino de vuelta a los segundos, los minutos, las horas, los días, los meses y años eternos. Tráela aquí, aquí junto a mis sueños, ya que ella es uno de ellos, devuélvela a altar de mis amores, ese altar que jamás debió abandonar, devuélvela a ese altar que llora su ausencia, devuélvela a mi esencia, nuestra esencia, nuestra fantasía. Devuélvenos nuestro todo, nuestro recuerdos, nuestro amor, nos pertenece, un amor que jamás debió haber sido arrancado de nuestros corazones. Tu fantasía ausente, tú que lo puedes todo, tú debes ayudarme, a mi el ser perdido entre los escombros de viejos amores olvidados y a ella, el fantasma que nunca ha querido dejar atrás las sombras y se esconde como puede de mi ser. Dime como encontrarla, dame una pista, que culmine en una escena romántica donde mi mirada se pose en la suya y el tiempo se haga nada, no somos más que ella y yo, en un instante que dura una eternidad, nuestros labios se funden y nuestras almas crean un perfecto son de alegrías y dulces sinfonías. Dímelo, retorna a mi vida, debes, ya no más fantasía ausente, te extraño con demasía, no me hagas más ésto, no más por favor, no más. Te lo imploro sin escatimar en nada, pero tu y ella deben regresar y cerrar este ciclo, para iniciar uno nuevo de fantasía y amor, que dure por siempre y siempre en nuestro corazón. No quiero más de desazón, quiero un sol que ilumine de principio a fin, una luna que cuide mis noches y los de ella, no hagas de la vida una cruel pesadilla, dí presente, ya no quiero que estés ausente, fantasía vuelve a mi, vuelve a brillar en la oscuridad de esta melancolía, brilla con fuerza amiga de dioses y alegorías, y retornale la fuerza, las ganas y las risas a la vida mía, prometo que ella y yo te mimaremos de noche y de día, juntos seremos alegría.

Uno al lado del otro

Yo creo que deberíamos estar uno al lado del otro
hablándonos al oído
sería todo más fluido
y nos entenderíamos mucho mejor

Tal vez no sea necesario hablar más bien susurrar
despacito, muy despacito, como un cariñito
ya que no habría necesidad de gritarnos o esperar el eco de nuestras voces
sería nuestro espacio secreto, nuestro mejor momento

Estaríamos juntitos, apretaditos, sería lo mejor
no tendría que esperar segundos eternos
por tus respuestas
solo bastaría con tu cara mirar
y yo todo el tiempo podría esperar
todo el tiempo que fuese necesario
pues no me aburriría de observar
cada uno de tus detalles

…

Ves
no existiría esa ansiedad
de romper ese silencio cruel
de borrar ese tiempo sin tenerte
de saber que piensas
de saber que haces
de saber como estas
de tenerte entre mis brazos
podría leer en tus gestos y miradas
esas palabras que tanto quiero oír
pues de ti quiero todo
pero no estas aquí
ni yo allá
y debo conformarme con quererte a la distancia
y esperar lo que sea necesario
hasta que un día sin más me susurres al oído
que ya nos podemos olvidar de la distancia
y podemos ser felices uno al lado del otro