Perfectas desconocidas, me asechan y esperan que algún día llegue mi caída
no les doy en el gusto, queridas amigas, aun falta mucho para mi partida
nadie ya necesita de mi compañía, pero aun yo sigo siendo fiel a mi profecía
cada hora, minuto y segundo que pasa, yo propago mi cálida y sencilla energía-
Sombras Oscuras, falsas deidades, fugaces estrellas, ellas miran como presumidas
ellas se burlan, hacen un festejo de mi frío verano, de mi amargo estado
al retirarme triste y cansado, queda el cielo nuevo, radiante y estrellado
ellas son chispas majestuosas y unidas, ellas no lo saben, pero están pervertidas.
Que el cielo me perdone, pero yo si pudiera lo modificaría
y en su lugar pintaría, una sola estrella de noche y de día
y ella solitaria y penumbrosa, a mi ella me representaría.
No quiero parecer un triste y quejumbroso soneto, pero yo lo acepto con gusto
ya que por mi vagan conceptos superfluos y de verdad no espero un final fausto
ellas felices reirán y yo seguiré estando maltrecho, ahora ya nada para mi es justo.
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